Un poquito de escándalo
Vamos a atacar ya el tema de la perfección y de la espiritualidad. En realidad, yo tengo unas cuantas ideas bien desarrolladas en mi primer libro acerca de eso y creo que es importante que la gente se sacuda las creencias que le limitan y le asfixian sobre dichos temas.
La religión ha influído excesivamente mal al ser humano con aquello de la verdadera perfección y toda esa retahíla de ideas sobre el pecado, el auto-control y los votos de negación acerca de lo que sea. Y lo ha hecho pensando en que somos seres involucionados o menores. Ahí está el problema. Algunas personas creen que este es un planeta por el que pasamos para acumular puntos "positivos" hacia el paraíso o cielo...La tierra goza de un cielo precioso, presume de tener los mejores amaneceres y atardeceres de esta gran galaxia. ¿De qué cielo hablamos?. Exactamente del cielo que hay en nuestro interior y que nos hará darnos cuenta de la maravilla que YA TENEMOS.
Ningún ser de luz puede perfeccionarse más de lo que es, simplemente es un darse cuenta...y ahí está el trabajo,¿verdad?. A veces cuesta toda una vida o vidas, y a veces, se convierte en un momento, un momento inolvidable.
Pero la perfección siempre está aquí, no allí.
Luego hay divisiones acerca de lo que es espiritual o no lo es...
Si todo lo que existe es LUZ,¿qué no va a ser espiritual?, ¿el qué?.
Tu camino entero es espiritual. Tu ser espiritual o tu espíritu está por doquier en todas partes. Todo lo que haces, dices, o piensas y sientes es espiritual. TODO.
Enfadarte es espiritual.
Decir tacos o palabras malsonantes es espiritual.
Sacarte los mocos es espiritual.
Tirarte pedos es espiritual.
Interrumpir es espiritual.
Mandar al carajo a alguien es espiritual.
Decir lo que piensas y lo que sientes es espiritual.
Masturbarte por placer es espiritual.
Tener sexo con alguien desconocido una noche es espiritual.
Estar furioso es espiritual.
Llevarte mal con todo el mundo es espiritual.
Llevarte bien con todo el mundo, NO. (jajajaja, es broma).
Ser grosero es espiritual.
Ser maleducado es espiritual.
No tener creencias religiosas de ningún tipo es espiritual.
Sentir hastío por la vida es espiritual.
Estar cansado es espiritual.
Odiar a todos es espiritual.
No tener ideales es espiritual.
No admirar a nadie es muy espiritual.
Bañarte desnudo en todos los lugares públicos es espiritual.
Hacer fotos de tumbas es espiritual.
Drogarse es espiritual.
Querer experimentar es espiritual.
Sufrir es espiritual.
Dañar es espiritual.
Estar confundido y no saber quién eres, es espiritual.
Vivir es espiritual.
Morir es espiritual.
Cantar mal es espiritual.
Cantar bien no tiene tanta gracia...jajaja.
No sentirse especial es espiritual.
Sentirse muy especial es espiritual.
Equivocarse...¿qué es equivocarse?.
¿Quién o qué determina lo que es equivocarse?. ¿Quién inventó esa palabra, de dónde procede?. ¿Qué significa realmente equivocarse?.
Si todo es perfección en el universo...¿cómo puede haber equivocación?. Dios no se equivoca y tú tampoco.
El amor y el perdón no son equivocaciones, son creaciones para gozar y expandir en tu vida más luz, más alegría.
No existen las equivocaciones. Dios no se equivocó cuando te creó. Eres perfecto tal como eres incluso cuando crees y sientes lo contrario...eso es perfecto. Debe ser así, sino, no habría expansión ni alegría de vivir. Tú eres perfecto siendo quién eres y experimentando todo lo que deseas vivir. No creas a los falsos cantos de sirena. Eres profundamente amado por la existencia y por tu divinidad creadora.
Es muy interesante lo que expresas, un punto de vista que comparto en buena parte, pero me gustaría puntualizar algo partiendo de mis creencias gnósticas - herméticas. Pienso que todo lo que somos y nos pasa es así porque debe ser así según nuestros actos; no es Dios, el gran espíritu del Todo, el que se equivoca, claro está, somos nosotros los que metemos la pata en este mundo de la materia al no conocer nuestra realidad interior y el mundo que vivimos. Porque este mundo material en el que estamos no es perfecto pero sí nuestro interior, que es el espíritu, que procede directamente de Dios. Por eso el que empieza a atender a su interior, al espíritu, se va dando cuenta de su perfección y va creciendo, pero el que permanece ciego en la materia se queda estancado en ella.
ResponderEliminarEso, por supuesto, no quiere decir dar la espalda a nuestro mundo material, sino saber vivir en él, disfrutarlo y usarlo como primer paso hacia la elevación... que se lo digan a los alquimistas... si no se empieza por lo bajo no se puede llegar a lo alto.