La puesta de LÍMITES
La puesta de límites es necesaria en la vida.
Si no los pones, los límites, llegarás a un punto de auto-odio que querrás desvelar y no sabrás cómo hacerlo, cómo abordarlo en tu camino.
Hace tres años que no me dedico a la terapia humana. Por decisión propia, por un "despertar" abrupto, en el que sostengo y mantengo que el sistema de TERAPIAS generales es un sistema de SUCCIÓN Y DRENAJE. Así como muchos sistemas implantados en la sociedad. Vivimos en un planeta donde el robo de energía es la NORMA.
Vivimos en un planeta donde NO CONOCEMOS lo que es la incondicionalidad. El AMOR incondicional.
Y lo que es peor, cuando se muestra dicho amor incondicional...muchos queremos apropiarnos de él, y no podemos. Ni debemos hacerlo.
Me siguen llegando correos, mensajes privados, donde se me solicita AYUDA, en muchas ocasiones, donde se me "exige" ayuda.
Nunca me he negado a ofrecer ayuda a nadie, de hecho, en realidad, ese ha sido UNO de mis GRANDES problemas en la vida. No saber decir NO.
Ahora no. No quiero. No puedo. No quiero. No debo. No quiero.
Tengo derecho total a decir NO.
Yo no soy un oráculo gratuito.
Tampoco soy una máquina de tabaco que ofrece un servicio diario y nocturno.
La gente está muy equivocada. Sobre todo, los terapeutas. Es mi opinión y experiencia. Pero comportarnos como dadores eternos y sin límites es un peligro para los que ofrecemos lo mejor de nosotros, y también a veces, puede ser un peligro para la persona que pide ayuda.
Debemos ser sabios para discernir cuándo ofrecer ayuda y cuándo decir que NO, y expresar lo que verdaderamente sentimos. Ya que la terapia se convierte en una esclavitud espiritual...sin saberlo.
Yo no estoy al servicio del prójimo. Estoy al servicio de mi CONCIENCIA. Y mi conciencia es LIBRE.
Cuando me dice que debo estar en permanente silencio sin perder NADA de energía, debo hacerlo así.
Porque las personas, a veces, nos convertimos en drenadores profesionales sin quererlo y sin saberlo.
A lo que iba.
Hay muchos artículos míos en mis blogs, en mis redes sociales que pueden ayudarte de diversas formas. Pero el cambio y el TRABAJO has de hacerlo tú. No pedir como un mendigo, cada minuto o cada día, una ayuda a otros. Si te conviertes en un mendigo de gurús, maestros, líderes, escritores, mentores, coaches, etc...jamás podrás convertirte en un ser soberano. Jamás.
Sufrirás de codependencia espiritual, y te aseguro que es la más GRAVE de todas. Y la que más hace sufrir sin saberlo. De ahí a que la Humanidad no haya soltado la teta del enganche a deidades religiosas o "espirituales".
No puedo ni quiero ayudar cuando estoy completamente retirada de un campo profesional que me dió más disgustos que bondades o bienestar.
No puedo ni quiero ayudar cuando la persona que se dirige a mí no tiene nisiquiera la educación para preguntarme qué tal me va la vida o el camino.
Es una falta de respeto y de invasión a la intimidad personal que yo ya no respeto ni tolero. No lo voy a aguantar ni tolerar.
Si no tenemos un mínimo de educación, la ayuda no será ni necesaria ni pura.
Cuando las personas te solicitan "ayuda" sin pensar en ti ni en cómo te sientes, ni en qué momento estás de tu vida ni nada de nada, es un ataque directo de la ENTIDAD QUE LLEVA la persona. Ya que quiere drenarte.
Me pasa contínuamente. Veo cómo las entidades se aprovechan de las fragilidades emocionales y de las dependencias físicas y espirituales para dañar a aquellos que ven cómo funciona este sistema ilusorio.
Yo no estoy para cumplir expectativas de nadie. Y mucho menos, gente que nisiquiera sabe en qué momento vital estás. Yo no soy un ejemplo ni quiero serlo para nadie. Excepto para mí misma.
La mala educación no la consiento.
El avasallamiento energético tampoco lo tolero. Lo ignoro y lo pienso ignorar siempre.
Si no somos conscientes de lo que damos, seremos conscientes de lo que recibimos.
No estoy aquí para solventar problemas de nadie. Tengo bastante con mi propia vida; inimaginable para muchos.
Mi vida no es fácil, pero tampoco quiero que me añadan más dificultades por PURO EGOÍSMO.
Porque soy consciente de que las personas, los humanos, son egoístas a más no poder. Sólo van a sacar tajada y a succionar al personal que no paramos de entregar info y consciencia...la que podemos. Y la que nos dejan.
Así que, conmigo no contéis mientras sólo queráis drenar. Tenéis cientos de miles de terapeutas ávidos de tener muchos pacientes/clientes fieles y seguidores adictivos. Id por ellos.
Yo no estoy para perder el tiempo ni mucho menos la energía.
Porque hoy lo que se requiere de parte de nuestros SERES reales es mantener la energía interna INTACTA.
Pero muchos todavía no han comprendido que a través de las terapias se DRENA, SE PARASITA, SE POSEE, SE INTERFIERE Y SE HACE DAÑO. Si no somos conscientes de eso, vamos a hacernos mucho daño espiritualmente. Mejor, permanece alerta y guarda tu ENERGÍA SAGRADA para ti, no la entregues al enemigo con personas ADICTAS a que los demás les resuelvan sus problemas y sus inquietudes. Porque es a través de ellos, que ENTRAN.
Si no los pones, los límites, llegarás a un punto de auto-odio que querrás desvelar y no sabrás cómo hacerlo, cómo abordarlo en tu camino.
Hace tres años que no me dedico a la terapia humana. Por decisión propia, por un "despertar" abrupto, en el que sostengo y mantengo que el sistema de TERAPIAS generales es un sistema de SUCCIÓN Y DRENAJE. Así como muchos sistemas implantados en la sociedad. Vivimos en un planeta donde el robo de energía es la NORMA.
Vivimos en un planeta donde NO CONOCEMOS lo que es la incondicionalidad. El AMOR incondicional.
Y lo que es peor, cuando se muestra dicho amor incondicional...muchos queremos apropiarnos de él, y no podemos. Ni debemos hacerlo.
Me siguen llegando correos, mensajes privados, donde se me solicita AYUDA, en muchas ocasiones, donde se me "exige" ayuda.
Nunca me he negado a ofrecer ayuda a nadie, de hecho, en realidad, ese ha sido UNO de mis GRANDES problemas en la vida. No saber decir NO.
Ahora no. No quiero. No puedo. No quiero. No debo. No quiero.
Tengo derecho total a decir NO.
Yo no soy un oráculo gratuito.
Tampoco soy una máquina de tabaco que ofrece un servicio diario y nocturno.
La gente está muy equivocada. Sobre todo, los terapeutas. Es mi opinión y experiencia. Pero comportarnos como dadores eternos y sin límites es un peligro para los que ofrecemos lo mejor de nosotros, y también a veces, puede ser un peligro para la persona que pide ayuda.
Debemos ser sabios para discernir cuándo ofrecer ayuda y cuándo decir que NO, y expresar lo que verdaderamente sentimos. Ya que la terapia se convierte en una esclavitud espiritual...sin saberlo.
Yo no estoy al servicio del prójimo. Estoy al servicio de mi CONCIENCIA. Y mi conciencia es LIBRE.
Cuando me dice que debo estar en permanente silencio sin perder NADA de energía, debo hacerlo así.
Porque las personas, a veces, nos convertimos en drenadores profesionales sin quererlo y sin saberlo.
A lo que iba.
Hay muchos artículos míos en mis blogs, en mis redes sociales que pueden ayudarte de diversas formas. Pero el cambio y el TRABAJO has de hacerlo tú. No pedir como un mendigo, cada minuto o cada día, una ayuda a otros. Si te conviertes en un mendigo de gurús, maestros, líderes, escritores, mentores, coaches, etc...jamás podrás convertirte en un ser soberano. Jamás.
Sufrirás de codependencia espiritual, y te aseguro que es la más GRAVE de todas. Y la que más hace sufrir sin saberlo. De ahí a que la Humanidad no haya soltado la teta del enganche a deidades religiosas o "espirituales".
No puedo ni quiero ayudar cuando estoy completamente retirada de un campo profesional que me dió más disgustos que bondades o bienestar.
No puedo ni quiero ayudar cuando la persona que se dirige a mí no tiene nisiquiera la educación para preguntarme qué tal me va la vida o el camino.
Es una falta de respeto y de invasión a la intimidad personal que yo ya no respeto ni tolero. No lo voy a aguantar ni tolerar.
Si no tenemos un mínimo de educación, la ayuda no será ni necesaria ni pura.
Cuando las personas te solicitan "ayuda" sin pensar en ti ni en cómo te sientes, ni en qué momento estás de tu vida ni nada de nada, es un ataque directo de la ENTIDAD QUE LLEVA la persona. Ya que quiere drenarte.
Me pasa contínuamente. Veo cómo las entidades se aprovechan de las fragilidades emocionales y de las dependencias físicas y espirituales para dañar a aquellos que ven cómo funciona este sistema ilusorio.
Yo no estoy para cumplir expectativas de nadie. Y mucho menos, gente que nisiquiera sabe en qué momento vital estás. Yo no soy un ejemplo ni quiero serlo para nadie. Excepto para mí misma.
La mala educación no la consiento.
El avasallamiento energético tampoco lo tolero. Lo ignoro y lo pienso ignorar siempre.
Si no somos conscientes de lo que damos, seremos conscientes de lo que recibimos.
No estoy aquí para solventar problemas de nadie. Tengo bastante con mi propia vida; inimaginable para muchos.
Mi vida no es fácil, pero tampoco quiero que me añadan más dificultades por PURO EGOÍSMO.
Porque soy consciente de que las personas, los humanos, son egoístas a más no poder. Sólo van a sacar tajada y a succionar al personal que no paramos de entregar info y consciencia...la que podemos. Y la que nos dejan.
Así que, conmigo no contéis mientras sólo queráis drenar. Tenéis cientos de miles de terapeutas ávidos de tener muchos pacientes/clientes fieles y seguidores adictivos. Id por ellos.
Yo no estoy para perder el tiempo ni mucho menos la energía.
Porque hoy lo que se requiere de parte de nuestros SERES reales es mantener la energía interna INTACTA.
Pero muchos todavía no han comprendido que a través de las terapias se DRENA, SE PARASITA, SE POSEE, SE INTERFIERE Y SE HACE DAÑO. Si no somos conscientes de eso, vamos a hacernos mucho daño espiritualmente. Mejor, permanece alerta y guarda tu ENERGÍA SAGRADA para ti, no la entregues al enemigo con personas ADICTAS a que los demás les resuelvan sus problemas y sus inquietudes. Porque es a través de ellos, que ENTRAN.
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