La AMBICIÓN en la mujer

 Siempre me pregunté por qué no funcionaba o me comportaba como una gran mayoría de mujeres frente a sus "sueños". Siempre me pregunté por qué muchas mujeres querían pertenecer a empresas, colectivos o escenarios "prestigiosos" donde eran humilladas, vejadas e ignoradas. Siempre me pregunté por qué muchas mujeres creían y adoptaban la triste medida de utilizar el sexo para llegar a ciertas "metas". Siempre me pregunté en qué se basaban sus "talentos" si tenían que utilizar la energía sexual para manipular ciertas situaciones que odiaban en secreto para ser adoradas y "admiradas" por aquellos que odiaban. Siempre me he preguntado por qué no era como las demás. JAMÁS me pregunté por qué no actuaba igual que ellas.

La ambición en la mujer ha sido malinterpretada por la sociedad porque ella, en general, no ha sabido defender su propia ambición. La ha vendido BARATA.

Cuando alguien tiene ambición de alcanzar objetivos en la vida debe preguntarse de DÓNDE NACE esa ambición. Si de Dios o del Demiurgo. No son lo mismo, aunque algunos (millones) nos hayan vendido la idea fabulosa de ser lo mismo.

Una mujer inteligente NO TIENE POR QUÉ COMPETIR con nadie, excepto con ella misma. Si utiliza arducias donde afea, arrincona, somete, insulta, denigra, miente y DAÑA a otro para alcanzar su objetivo (que es un objetivo de DIOS) no es ambiciosa, está siendo interferida por fuerzas del Demiurgo. Y no se olvide decir que sus talentos, aunque los tuviere, van a ser apagados con el tiempo por dicha ambición.

UNA MUJER INTELIGENTE no necesita suplicar ni sufrir condenadas pruebas para saber que merece su objetivo. Sabe que lo merece y que vendrá por el mejor camino despejado de la FUENTE UNA DIVINA. No se verá sometido a caprichos de hombres de negocios astutos, empresarias sucias mentalmente y llenas de envidia por aquellas que no se someten como estas lo hicieron con su dignidad y tampoco se verá sometido por el aparente fracaso social que nos etiquetan las mentes dormidas.

UNA MUJER INTELIGENTE NO NECESITA COMPETIR con nadie. LE SOBRA TALENTO Y TRABAJO. SABE que la fuerza divina trabaja más suavemente y lentamente que las fuerzas del Demiurgo, donde la rapidez, la cutrez inmediata, el aplauso borreguil y las satisfacciones materiales alcanzan al INCAUTO y al desconectado de la fuerza motriz divina.

Utilizar la sexualidad para alcanzar x objetivos determina qué tipo de esencia eres. ¡OH, SÍ! determina qué quieres y QUÉ NO ERES. Vuelve a leerlo.

He tenido una vida difícil, DURA, MUY DURA...no he podido adaptarme a nivel empresarial, a nivel social, a nivel familiar, a nivel amistoso, a nivel...he sido muy malinterpretada toda mi vida. No comprendida y abiertamente ODIADA Y ENVIDIADA hasta niveles indecibles. Y no he sido odiada y envidiada por "lo que tenía", sino por QUIÉN ERA. Me han odiado por mi seguridad, por mi asertividad, por mi humor en momentos donde "no toca tener humor", por mi felicidad en situaciones donde otros se hubieran suicidado. No tengo NADA a nivel material. No tengo nada para dejar ni nada para que alguien me recuerde. Y sigo siendo yo, a pesar de todos los obstáculos. Que son interminables cada día, cada segundo, cada micro-segundo...

Supongo que no he luchado como esa mayoría de mujeres han hecho por sobrevivir: haciendo daño a sus compañeras humanas, despidiendo al que más talento tiene o incluso algunas pagarían POR MATAR para eliminar a esa que tanto brilla y tanto le molesta. 

Existen ese tipo de personas, ese tipo de mujeres que "harían cualquier cosa" por lograr su objetivo MALDITO POR EL DEMIURGO. Y conmigo lo han hecho, créeme. Lo que pasa es que les salió mal. Porque yo tengo el APOYO Y LA PROTECCIÓN TOTAL de mi fuente divina. Y jamás utilizaría el mal para lograr mis objetivos o sueños. YO SOY DEL BANDO DE LA LUZ y cuando "pierdo", sonrío. Y cuando alguien ocupa el puesto que yo creía era para mí, FELICITO y me siento bien por esa persona o mujer u hombre que ha llegado hasta ahí. Y siento que Dios le ha puesto ahí por algo. Y a mí en mi lugar también por algo. No discuto con lo que HAY Y EXISTE. Acepto. 

Ya no lucho con las fuerzas del mal. Las acepto. Creo en leyes naturales. Y no me importa cuánto tiempo pase. El tiempo es una ilusión horrenda en esta cápsula. De las peores, donde la gente CAE y se atrapa a sí misma en pos de algo que no es suyo.

No soy ambiciosa al uso. No soy ese tipo de mujer. Mi mayor ambición es Dios. Estar siempre en esa fuerza interna que me habla y me dice por dónde ir, cómo ir y qué elegir. No me comparo con nadie. YO NO PERTENEZCO A LAS MASAS. Nunca lo hice, ni siquiera cuando era niña. Yo movía a las "masas" de mis amigos y amigas. Yo lideraba, creaba, organizaba, planeaba, imaginaba y JUGABA. También esponsorizaba a TODOS a todas horas. Todo el día, sin parar. CREÍA EN LA GENTE. 

Ahora tengo más cancha. Ahora pierdo menos energía. VEO MÁS.

Mi ambición es la bondad máxima para conmigo y los demás. Mi ambición es la confianza en aquello que aparentemente no se debe confiar. Me gustan los riesgos espirituales. Son los únicos que me apasionan de verdad.

CREAR, independientemente de si mi obra va a ser aplaudida o no, me vuelve loca. CREAR es mi razón de ser. CREAR, aportar, incluso desaparecer tú misma en pos de la supervivencia de TU OBRA...me hace estremecerme. Como imagino lo hizo Cristo, Jesús el griego.

¿Te has llegado a plantear por qué tenemos libros sagrados a nuestro alcance como la Biblia o la Torah? ¿no se supone que nos han mentido en TODO? ¿sabes que nos han mentido en todo, no?

Partiendo de esa base, ¿por qué nos habrían regalado dichos libros a la Humanidad? Piénsalo.

Tal vez, el GRAN LIBRO O GRANDES LIBROS SAGRADOS no están a nuestro alcance por diversas razones. 

Imagina un libro ESCRITO Y REDACTADO a mano por el mismo Jesús el griego o mal llamado de Nazareth. Imagina qué podría llegar a decir este SER MARAVILLOSO en SU LIBRO. Pero su esencia no ha sufrido por eso. SABE que cualquiera que despierte lo verá. Llegará a muchos conocimientos y verdades. No ha estado intranquilo ni un sólo día. Ni preocupado. Porque su obra, su real obra ha estado protegida y visionada por aquellos que temen que la verdad salga a la luz. Pero la verdad SIEMPRE SALE. Siempre emerge. Porque la verdad de Jesús no está en su libro. ESTÁ EN TU CORAZÓN. En tu SER.

Cualquiera que ponga a prueba a aquellos que están conectados con su fuerza espiritual...no han entendido quiénes son los que tienen enfrente. Su ambición es desmesurada y está guiada por el Demiurgo, no por Dios. Dios fluye fácilmente dentro de tu corazón. La duda pertenece a la cabeza. A la serpiente. Y hay que desecharla...liberando nuestros miedos. El miedo a que los ambiciosos de Dios sean los mismos que los ambiciosos del Demiurgo. 

El ambicioso de Dios está lleno de bondad y no teme el fracaso porque el fracaso nos brinda humildad ante la fuente universal divina, no nos procura más que humildad, humildad ante la esencia eterna que hay dentro de nosotros y que es mayor que cualquier deseo o sueño que tengamos.

Dios sabe lo que hace. Mi ambición es aprender de ello, de todo. DE TODOS.

Invito a que las mujeres pierdan el miedo a ser humildes, pierdan el miedo a parecer que están en tercer lugar o vigésimo quinto lugar en la vida, en el camino vital. Porque Dios no se equivoca. Ni hombres ni mujeres deben rendirse a la ambición de las apariencias.

Un rey o una reina no tiene ni debe estar por encima de otros. 

Un rey o una reina debe o tiene que estar dentro de cada uno de nosotros o todos y HONRAR a cada ser de la forma que Dios lo haría.

Para mí esa es mi mayor ambición.