Los TRAUMAS de los despiertos
¿Alguna vez no te has visto en la tesitura vital de que si ya tenías un TRAUMA NO RESUELTO, de repente viene la vida y sus desafíos y te dice: toma esta prueba DOBLE a superar y elimina ese dichoso trauma? Bien. Ahora estamos en ese punto, muchos.
Especialmente, los despiertos.
De hecho, los traumas se generan para que no podamos AVANZAR. Con la ayuda inefable de las fuerzas arcónticas o demoníacas (llámalas como quieras. Son la misma mierda), ellas nos ponen en un nivel donde el shock, la paralización emocional/espiritual o la incapacidad para dar un salto cuántico de nuestra expansión divina/humana sean las monedas que obtengamos para alcanzar... NADA. Desgraciadamente, nada.
Lo duro y difícil de los traumas no resueltos es que te anclan en un dolor profundamente incomprendido y no te permiten no ver la verdad, sino aceptarla. No poder aceptar una verdad hermosa es de lo más frustrante, doloroso e injusto para nuestro corazón de lo que podamos creer. Y al final, al no poder aceptar esa verdad debido a nuestra incapacidad de ELEGIR por temor al DOLOR, sufrimos y nos condenamos a una eterna lucha interior que parece que nunca acabe.
Lo siento y vivo en mí, pero también lo veo en otros compañeros de fatigas. Mucha gente despierta o semi-despierta que lo pasa mal debido a esos traumas que EL MAL nos ha provocado ADREDE y con alevosía, no puede creer en ciertas verdades. La disonancia cognitiva que sentimos es de tal nivel que la paralización es la norma básica en estos casos. Y es por esa razón que yo recomiendo ser SUAVES Y AMOROSOS con nosotros mismos.
Uno sabe lo que ha sufrido en su vida y por qué. Pero sólo Dios sabe PARA QUÉ.
Y esa en ese PARA QUÉ...en ese para qué debemos poner nuestra fe. Nuestra confianza. Nuestra mirada.
Cuando los traumas nos acechan y nos hacen sufrir en demasía, debemos ser justos y profundamente amorosos con nosotros mismos. Merecemos nuestra comprensión, nuestra paciencia y nuestro ánimo interno. Y ser honestos con otros. Muy honestos. Y expresar nuestros miedos más profundos al mundo para que estos, cada vez, sean liberados de nuestro interior con más rapidez y facilidad.
El dolor sólo sirve para una cosa o al menos es lo que elijo creer: el dolor sirve para que nuestra conciencia sea más INCONDICIONAL, LIBRE Y AMOROSA. Nada más que para eso. Y nada menos.
Si cada ser humano necesita un tiempo determinado para sanar sus traumas vitales...ese tiempo debe ser respetado. Es justo y necesario.
Yo pido hoy a Dios, a la Fuente Divina, que nos ayude a todos los despiertos a liberar nuestro dolor más profundo y nos ayude en la liberación y sanación completa de todos los traumas. Porque nunca olvidemos que es a través de estos, que las fuerzas obscuras NOS DAÑAN, NOS ATACAN, NOS DEBILITAN Y MATAN NUESTROS SUEÑOS MÁS INCREÍBLES. No se los permitamos. No permitamos que MATEN NUESTRA ESENCIA REAL.
No permitamos que nos conviertan en zombies vivientes.
Pido para que todos sanemos cada trauma que llevemos a cuestas. Para que esos traumas sean LIBERADOS PARA SIEMPRE. Y nosotros, pongamos de nuestra parte.
A veces, Dios nos pone una prueba mucho más difícil que la anterior porque nos está diciendo: SALTA, SALTA CONMIGO. Ahora vas a SANAR DE VERDAD TODO. SALTA. Eso sí, hagámoslo a nuestra manera y a nuestro ritmo. Tenemos la eternidad de nuestro lado. Mucho amor para todo aquel que esté viviendo enfrente de TODOS SUS TRAUMAS EN ESTE MISMO MOMENTO.
Lo vas a lograr. Lo vas a superar. Lo vamos a superar. ¡POR MIS SANTOS OVARIOS!
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