El apellido no es la puerta
La familia Rothschild no acaba en su apellido. Es vilmente astuta. La progenie se instala en hijos "bastardos" en todas partes de la planicie de Tierra para que nos mareen con sus juegos sucios aparentes de disfraz.
Dicha familia o extirpe acaba en la SOBERBIA. Serán reconocidos por esta en todas partes. Son poderosamente soberbios y altivos. Fríos y distantes o aparentemente seductores.
Cataluña está llena de ELLOS. Y también de la Nobleza negra italiana. Algunos son conscientes de saber de dónde vienen y otros, NO. Los que no lo saben serán "despertados" cuando la verdadera extirpe pueda ser arrasada o acabada por la LUZ. Dichas sombras los custodian para los momentos que ellos consideran perfectos.
Soberbia es su SELLO.
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