Soy una mujer que no busca el amor. Yo ya me encontré hace tiempo y sé quién soy. Sólo exijo RESPETO. Con el respeto, NO NEGOCIO.
No hay nadie en este mundo que me conozca mejor que yo misma. Sé cuáles son mis necesidades y sé qué es lo que no necesito. Sé cuál es mi tiempo y sé por dónde he caminado y sé por todo lo que he pasado sin que nadie mirara cada paso, excepto yo misma.
No siento vergüenza por ninguna elección que tome, no siento culpa ni arrepentimiento. Los errores son vistos por la gente como pequeños castigos que una debe hacerse por ELEGIR según el conocimiento que una tiene en ese instante.
La intención emocional y espiritual de la elección a tomar...esa es lo que realmente importa. Lo que hagan los demás o lo que vean los demás sobre tus elecciones desde fuera, me importan un carajo.
Las expectativas que tengan los demás con respecto a mi persona son sus expectativas que NO VOY A CUMPLIR. No nací para agradar a nadie ni para completar a nadie ni para arreglar a nadie. Nací para ser quién soy. Y yo soy más que suficiente.
No estoy aquí para cumplir un papel determinado o específico. Soy una mujer libre, libre de este sistema impuesto y lleno de MENTIRAS. No bailo el agua de los que están adoctrinados con la sociedad del consumo y de la productividad. No me interesa esa sociedad. No me interesa que la gente comprenda o no comprenda mis puntos de vista. No me interesa que la gente me entienda. Con que no me jodan, es suficiente.
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