R.I.P.
A la próxima persona que me diga que debo seguir siendo fuerte, juro que lo mandaré a tomar por culo.
¡Ya no seré más fuerte!
Murió la fortaleza en mí y no pienso resucitarla. Ni darle una oportunidad si quiera.
No soy una mujer fuerte y no quiero volver a serlo jamás en toda mi vida.
Se acabó la fortaleza, la fuerza y la tensión de mi espíritu.
No quiero ser una mujer fuerte nunca más.
Que lo sean todos por mí... yo seré quien quiero ser: pura fragilidad. Templanza y debilidad espontánea.
Sé tú fuerte por mí. Sédlo vosotros, que podéis tensaros como juncos y convertiros en las bestias que esta realidad quiere para ella misma.
No me volváis a llamar mujer fuerte porque no lo soy.
Seguid cometiendo las mismas estupideces que la sombra quiere de las esencias puras: pobredumbre y hastío vital.
Dejadme con mis lágrimas y mis silencios y mis torpezas. Dejad de medir cuán débil es mi bondad, mi sumisión o mi lealtad...para ver si es equitativa o comparativa a los intereses que tanto os llaman de mi propia luz.
Dejad de llamarme fuerte y dejad de convertir a la sensibilidad en supuesta carroña para hienas. Preocupaos bien de vuestros miedos ante las "vulnerabilidades" ajenas.
Muerte a la fortaleza de los hombres y de las mujeres que creyeron en las mentiras de los que las sometieron a sus camas y deseos.
Muerte a la fuerza que sostiene el sacrificio de los cobardes que no escuchan a su voz interna.
Esto no es una prosa...es VERDAD. Mi verdad.
No tratéis de cambiarme sólo porque os hace temblar la sensibilidad altamente pronunciada. NO SOY FUERTE. Y lo peor para vosotros: no quiero serlo. Es una promesa conmigo misma y no pienso romperla.
Sed vosotros los fuertes...eso es lo único que podéis ser.
Soy tan "débil" que muchos quieren ser amados por una mujer como yo. Pero nadie se atreve a amarme cómo yo soy. Son ambiciosos y buscan su propia satisfacción espiritual y física, pero no me conocen, no quieren conocerme porque la debilidad, la sensibilidad les pone en una tesitura incómoda, irritante, doliente, LOS DESNUDA.
Por eso amo mi fragilidad...porque los desnudo a todos y no pierdo ni mi espíritu ni mi tiempo en el camino del reconocimiento.
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