No tengo redes sociales...

 NO TENGO REDES SOCIALES desde hace un tiempo. Más de un año. Si veis cualquier movimiento con mi nombre en las redes, definitivamente, NO SOY YO. 

Sigo siendo monitoreada 24/7, acosada, perseguida, atacada y vigilada. Sé que me han seguido, me han hecho fotos y seguramente algún video. Y no soy NADIE peligroso, pero sí quiénes me vigilan, espían y acosan de manera organizada. Pagan a especialistas de la mente para dañarme sin parar. Y los rituales ya se han convertido en el pan de cada día desde hace meses (por no decir años). No pararán hasta que me maten, ya que soy un cable suelto. A mí lo único que me importa es Dios. Y si Dios quiere que yo me vaya de este puto infierno, será un alivio. Incluso para mí.