La verdad MUERTA

 Nunca hemos estado más lejos de la verdad.

La verdad ya no importa. Nunca importó. Sólo importa el sostenimiento de la matrix ilusoria. La verdad se ha convertido en una quimera, peor, en una pesadilla de la que huímos. 

Y asesinar la verdad es asesinar a Dios. 

Nadie quiere vivir con Dios porque lo que más asusta en este mundo es la VERDAD. Y sólo se puede conocer a Dios a través de la verdad, de toda verdad. Toda existencia alejada de la verdad es mera supervivencia biológica. 

No hay vida más sentida que la que se vive desde la verdad, ya sea que nos cueste todo. Incluso si nos cuesta la vida; esa vida que tiene manos y corazón. 

No podemos estar más alejados de la verdad que hoy. Ni siquiera podemos vislumbrarla...sólo tenemos ecos de la misma. Y quien está lejos de la verdad, está lejos de la libertad.