Compartir ¿para qué?

 No creo que le importe a mucha gente lo que pueda estar viviendo en primera persona. No soy de esas mujeres que cree que lo que comparto a través de un blog es importante para mucha gente. No lo es ni lo será, pero el sufrimiento siempre fue menos cuando escribía y compartía a ese mundo que yo creía inocente y complejo.

He perdido completamente la inocencia. Están trabajando arduamente para que no vuelva a creer en ella nunca más. Y lo que más temo es que la gente crea a ciegas en "salvadores" y bienaventuranzas cuando lo que se gesta en lo oculto es ... indefinible. Y grotesco.

Estoy siendo tan atacada y agredida espiritualmente que no tengo esperanza de que nadie me crea, pero yo creo en mi espíritu que me ha traído hasta el momento presente "no se sabe cómo", pero lo hizo. 

Vivimos en un mundo donde todo lo que es hermoso y puro, será destruído, perseguido y aniquilado. Donde el amor verdadero es una broma para los crueles y los que son oscuridad venenosa. 

El daño recibido no tiene justificación ninguna. Sólo la profunda oscuridad y maldad que yace en aquellos cuerpos inertes que hacen de casa del mal mismo y sus quehaceres, que son muchos. 

La persecución sobre mi persona es inimaginable y lo peor de todo es que lo hacen tras bambalinas. Porque los verdaderos monstruos del planeta Tierra NO HAN SIDO destruídos. Están siendo protegidos y venerados en el núcleo de la Tierra y cientos de milicias especiales que desconocemos... los custodian. Ofreciéndoles vidas humanas "insignificantes" para sus sacrificios continuados de sangre y depredación terrorífica. 

Lo más tenebroso es que quien hace dichos sacrificios son seres que creen que sirven a un Dios omnipotente. Cuerpos llenos de demonios impensables para las mentes de los ingenuos. Han asesinado en mí mucho...han matado a parte de mi espíritu, lo han deshecho en lágrimas eternas y han arrancado de mí lo que nadie podía arrancarme a pesar de las heridas vitales. Sólo le pido a Dios que me lleve pronto con él porque no puedo soportar ni un minuto más tanta crueldad e indiferencia humana ante la barbarie, el crimen, el asesinato y el sacrificio humano. 

Es tanto el daño producido que no puedo ni compartir todo lo que están haciéndome. Yo, mujer valiente, ya no tengo cuerpo ni corazón donde quepa más sufrimiento ni dolor. 

Este mundo no sabe lo que es la Divinidad ni sabe lo que es el amor. Vive ciego y a oscuras. ¡Están matando a tantos seres inocentes y bellos!

Mi corazón está gritando ayuda y no llega, no llega, no llega...

Cuando están ofreciendo cheques en blanco por ti, por tu deceso...algo grave y fuerte está sucediendo. Pero nadie escucha bien. Todos estáis bajo control mental, por parte de los "malos y los buenos". Veo a una disidencia anestesiada e incapaz de decir: esta boca es mía. Todos estáis repitiendo los mismos patrones y discursos, ninguno está saliéndose del guión y haciendo preguntas incómodas. Da verguenza ajena todo lo que está sucediendo mientras el pueblo entero del planeta no puede ni comprar sus víveres como antes. Donde todo sube menos los sueldos...donde la soga es cada vez más corta y con pinchos.

Sólo le pido a Dios que nos dé descanso y paz. Porque no podemos más. No puedo más.