Porque te lo has ganado a pulso...lo sé, suena un poco fuerte.
Esta pregunta es importante, muy importante y la he escuchado un par de veces esta última semana.
Mi respuesta es mentira, y a la vez, VERDAD.
Creemos que lo sabemos todo sobre la educación de los hijos, de los vecinos e incluso de nosotros mismos y lo cierto es que mientras sigamos considerando a los niños y adolescentes "parte de nuestro patrimonio", lo llevamos un poco crudo.
Veo constantemente una gran falta de respeto hacia los niños y hacia los adolescentes.
Es tan grande la capacidad de hacerles daño que me deja estupefacta y muchas veces herida.
Todo aquello que afecta a los niños...me parte el alma, me destroza por dentro. Soy frágil ante estos...y a la vez, me siento tan fuerte cuando me sumerjo en sus mundos!!!. Son vivos, piensan, dirigen, sienten sin miedo, rien, se arriesgan, son valientes...y el mundo adulto...sin comentarios.
Los adultos dormidos me decepcionan un día sí y otro también. No ven a sus hijos, no los ven!!!.
Los tratan como si fueran subnormales, seres sin ningún tipo de autoridad, ya que ellos, los MAYORES, los MADUROS por excelencia son los que manejan esa autoridad, esa invasiva autoridad, esa apestosa autoridad.
Todavía no pensamos que todos somos almas con un bagaje espiritual, y en ocasiones, uno muy grande.
Veo SERES de luz tan sorprendentes en niños que me dejan anonadada, hipnotizada. Están llegando seres muy evolucionados al planeta y los padres que un día no sé porqué narices decidieron tener un hijo siguen atormentándoles con sus dormideras generales.
El adulto medio NO ESCUCHA.
El adulto medio NO RESPETA.
El adulto medio NO CONFÍA.
El adulto medio NO VE.
El adulto medio ESTÁ DORMIDO.
Y si un adulto medio está dormido,¿qué coño le va a enseñar a su hijo???. NADA.
Nada de nada, pero nada.
Y como están tan dormidos son bendecidos con seres mega-super-hiper evolucionados que vienen a despertarlos un poco.
Y claro, un niño que viene con una maleta llena de experiencias vitales-espirituales es un MAESTRO, y como tal, ACTUARÁ.
Pero la sociedad de la DORMIDERA lo machacará hasta morir, le dirá que está equivocado y que es un elemento perturbador para su estabilidad neurótica. Y sueltan esas grandes frases de enfermos mentales(con todos los respetos pa los colegas de los psiquiátricos):
Cariño, ¿porqué no eres como los demás niños, normal?.
Cariño, ¿porqué tienes un carácter tan fuerte y tan insoportable?.
Cariño,¿porqué no me haces caso?(hazle caso a un dormido y prepárate para acabar medio-chalado).
Cariño,¿porqué eres tan poco cariñoso?.
Cariño,¿porqué eres tan EGOÍSTA?(SI UN NIÑO CONSIGUE ESO DE UN DORMIDO ES QUE ES UN MAESTRO ASCENDIDO Y DESCENDIDO).
Cariño, ¿porqué me odias?...un dormido es incapaz de SABER LO QUE ES EL AMOR, así que el odio también es algo dudoso para este.
El amor no es una garantía; es un privilegio, un milagro, una libertad mágica. Y pensar que por el hecho de haber decidido traer un hijo a este mundo va a ADORARTE y venerarte...estás en un camino erróneo de crecimiento.
Dime cómo te tratas a ti mismo y te diré cuánto respeto te tendrá tu hijo, cuánto amor o admiración provocarás en él.
No podemos echarle las culpas a nadie. No podemos seguir echando balones fuera de campo y no admitir nuestras propias responsabilidades.
Deberíamos trabajar más en nosotros, y sobre todo, RESPETAR A LOS SERES HUMANOS que llevan el papel de hijo en tu vida. Porque después de todo, son seres humanos que cuidarán de sí mismos algún día...y tú habrás sido su primer ejemplo pero NO EL ÚLTIMO.